Me tenías en tus manos
como violeta mancillada
por los vientos fríos del norte,
por los llanos y caminos
caminaba cabizbaja y callada.
Me tenías atada a tu cintura,
yo era una pobre criatura
que dependía solo de ti,
que para vivir respiraba tu aire
pero me hiciste un desaire.
Me tenías en tus redes
como a un pez en ellas atrapado,
estaba comiendo de tu mano,
viviendo entre cuatro paredes
en ti pensando y por ti llorando.
Me tenías presa en una jaula de oro
que con gran paciencia y decoro
construiste especialmente para mi,
donde jamás pudiera escapar de ti
y me quedara atrapada en tus deseos.
Estaba en tus manos y me dejaste ir,
abriste las puertas para que volara,
rompiste los lazos y esas cadenas
tan fuertes para que pudiera huir,
para que de ti me fuera y te olvidara.
SHANIA LYNN
como violeta mancillada
por los vientos fríos del norte,
por los llanos y caminos
caminaba cabizbaja y callada.
Me tenías atada a tu cintura,
yo era una pobre criatura
que dependía solo de ti,
que para vivir respiraba tu aire
pero me hiciste un desaire.
Me tenías en tus redes
como a un pez en ellas atrapado,
estaba comiendo de tu mano,
viviendo entre cuatro paredes
en ti pensando y por ti llorando.
Me tenías presa en una jaula de oro
que con gran paciencia y decoro
construiste especialmente para mi,
donde jamás pudiera escapar de ti
y me quedara atrapada en tus deseos.
Estaba en tus manos y me dejaste ir,
abriste las puertas para que volara,
rompiste los lazos y esas cadenas
tan fuertes para que pudiera huir,
para que de ti me fuera y te olvidara.
SHANIA LYNN
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