No quiero decirte adiós...

No quiero decirte adiós porque me duele en el alma y corazón…
no, no quiero ni puedo arrancarte de mi vida y de mi piel, tatuada llevo en todo mi ser tu esencia, 
ese perfume que me excita y me provoca un éxtasis de delirio y de deseo, no puedo arrancarte de mis pensamientos ni por un momento y arden mis entrañas en la hoguera de solo pensarte y de desearte.

No puedo decirte adiós deseándote como te deseo, transpirando por cada poro de mi piel el sudor salado en cada entrega, esperándote como te espero que traspases el umbral de mi habitación y llegues hasta mi, pensándote como te pienso en mis noches frías y llenas de soledad. Abrazo mi almohada y la beso, la huelo para ver si aún queda impreso en ella el olor a ti…y te siento y cierro los ojos para pensar en ti, para soñar despierta que ya estás aquí, toco tu espacio pero está vacío y frío mi costado.

No quiero decirte adiós hasta que mirándote a los ojos me digas de frente que ya no me amas, que ya mis caricias las sientes ajenas, lejanas, distantes y que solo fuimos los fieles amantes pero que ya todo eso es solo una parte de nuestro pasado, que así lo has deseado y que ahora tus sueños vuelan otros cielos y tus deseos descansan ya en otra cama donde hacen arder una nueva llama.

No, no puedo decirte adiós mirando el vacío que siento dentro de mi pecho, aún está tibio y tiene tu fragancia nuestro eterno lecho, mi almohada me grita muy desesperada que soy bien amada y que no tengo por que ser por ti olvidada. Tengo mil razones para no decirte adiós, una despedida se que duele tanto, que causa dolor y nos causa llanto, una infinita tristeza que con nada se nos quita y que no hay razón para pensar en decir adiós cuando un corazón guarda un gran amor y solo hay que pensar en volver a amar y ese gran amor poder entregar.

No quiero decirte adiós, solo un hasta pronto vida mía y le pido a Dios a ti estar unida de por vida.

SHANIA LYNN