Apago la luz y veo al techo,
mi pensamiento vuela a ti,
estoy sola y es frío el lecho
y quizá tu pienses también en mi.
Por la ventana se vislumbra
una estrella linda e inquieta,
me llena con su luz ultravioleta
entra en mi habitación en penumbra.
El sueño se fue a morar en otra almohada
y quizá ya en la alborada,
de mi pensamiento te ha de borrar
junto a mi gran deseo de volverte a amar.
Tu ausencia me quema el alma
y la maza encefálica se me derrite
de tanto pensar me quitas la calma,
cansada de rogarte y de pedirte.
Que vuelvas a mi son mis plegarias
al Cristo crucificado le he implorado,
si estas aquí son secundarias
nada me falta pues lo he logrado.
Apago la luz y veo tu efigie
aun cuando el sueño cierra mis ojos
y cuando en los brazos de Morfeo me refugie
sentiré tu boca en mis labios rojos
como dulce nota de una sinfonía.
SHANIA LYNN
mi pensamiento vuela a ti,
estoy sola y es frío el lecho
y quizá tu pienses también en mi.
Por la ventana se vislumbra
una estrella linda e inquieta,
me llena con su luz ultravioleta
entra en mi habitación en penumbra.
El sueño se fue a morar en otra almohada
y quizá ya en la alborada,
de mi pensamiento te ha de borrar
junto a mi gran deseo de volverte a amar.
Tu ausencia me quema el alma
y la maza encefálica se me derrite
de tanto pensar me quitas la calma,
cansada de rogarte y de pedirte.
Que vuelvas a mi son mis plegarias
al Cristo crucificado le he implorado,
si estas aquí son secundarias
nada me falta pues lo he logrado.
Apago la luz y veo tu efigie
aun cuando el sueño cierra mis ojos
y cuando en los brazos de Morfeo me refugie
sentiré tu boca en mis labios rojos
como dulce nota de una sinfonía.
SHANIA LYNN
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