martes, 30 de marzo de 2010

Siempre te amaré

viendo al mar
Te amaré en el arrullo de la ola,
en el graznar del ave enamorada
que le canta a la vida en la alborada,
te amaré en el murmullo del viento
al caer las hojas del pimiento
y cuando me sienta abrumada y sola.

Siempre te amaré en mi inconsciencia,
en ese sueño profundo del letargo,
cuando me mata ese trago tan amargo
o cuando me pierdo en la demencia
sumida entre lo espeso de la bruma
y cuando la desolación a mi se suma.

Te amaré en la quietud de la mañana,
cuando el sol penetre en tu alcoba,
y la luna de velar tu sueño ya cansada
haya dejado su luz por la ventana
y con pereza tu figura se encorva,
como si llevara una pesada carga.

Te amaré en lo profundo de lo sublime
como mudo testigo de lo intenso y vivido,
guardaré de ti dulce amor mío
ese bello reflejo para que hoy me anime,
sumergida por ti en el olvido
y congelada el alma por el frío.

Te amaré en el rayo del sol naciente,
en el reflejo azul de la luna en el río,
te amaré en el ocaso reluciente,
en el bello color del arco iris
y en el silencio del latir del corazón,
te amaré muriendo de desamor y de hastío…

SHANIA LYNN

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