Me enamoré de
unos ojos,
de unos ojos
que son muy bellos
que de solo
mirarme en ellos,
me muero por
robar sus besos.
Son ojos color
de aceitunas,
de pestañas largas
y rizadas,
y me pierdo
entre sus dunas
oyendo el canto
de las hadas.
Con el verde de
los campos
los comparo y
los observo,
con ellos
pierdo mis tiempos
jugando con la
rima y con el verbo.
Me enamoré de
unos ojos
tan bellos como
no hay dos
y al besar sus
labios rojos
me hacen perder
la voz.
Son unos ojos
divinos
que con su
mirar me acarician
son hermosos,
son felinos
y a quererlos
me invitan.
SHANIA LYNNE
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