Se desprenden
en gajos los hielos
al contacto del
calor de dos cuerpos
y bajan como
ríos los deshielos
pintando de
blanco a los verdes campos.
Ruge el trueno
y el rayo en la tormenta
ocultando tras
de si a los gemidos,
nadie nada en
la hoguera se lamenta
ni se escuchan
del amor esos sonidos.
La nieve se
deshace al calor
de los besos y
caricias se derrite,
apenas se
escucha el rumor
cuando la
respiración así se agite.
Bajan
arroyuelos que brotan por los poros
y los sudores
empapando a las pieles,
al mostrar al crepúsculo
sus oros
dibujados por
los mas finos pinceles.
Campos nevados
orodados de sudores
a la cabeza se suben
los fuertes calores
y se derriten
de deseos las pasiones
en diversas y
variadas ocasiones.
El éxtasis en
la cumbre se avecina
y del placer y
las ganas se despoja,
ruge al final
el trueno tras la hoja
ocultándose el
deseo tras de la encina.
SHANIA LYNNE
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