Señor años vienen y años van
y mi plegaria siempre es la misma,
mis latidos a mis sentimientos enervan
cuando pido la descomposición del prisma.
Cuando te ruego que el amor llegue
cada vez que mi plegaria eleve,
hasta tus plantas estoy de hinojos
con la esperanza de ver sus ojos.
Señor, soñé que un amor a mi llegaba
pero los años pasan y no es posible
que esta espera sea apacible
porque este amor mucho tardaba.
Pasó el invierno y dejó su estela
y con mis brazos cubrí mi cuerpo,
aterida por el frío y el desconsuelo
bajo tu altar prendí una vela.
Y así pasaron las estaciones
pero por mas que recé mis oraciones,
el otoño me halló en mi dulce espera
y en la tristeza que me dejó la primavera.
Cae la tarde sobre mis sienes
y en mis cabellos la blanca nieve,
por qué el amor a mi no viene
a encender en mi su fiebre…?
SHANIA LYNNE
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