jueves, 20 de agosto de 2009

En un rinconcito

mi enrramada
En un rinconcito pequeño
de la costa Michoacana,
en ese pedazo de cielo
donde vivir es mi sueño
y trabajar es mi anhelo.

Quiero construir mi hogar
con palapas y palmeras,
he de encontrar un lugar
donde me bañe la brisa,
y viva de mis quimeras.

Quiero ponerle por techo
el manto azul de mi tierra,
sus paredes de barro negro
y muy dentro de mi pecho,
no he de extrañar la sierra.

Cos sus noches azabache
plagadas de mil estrellas,
el rumor de las olas tibias
y la luna haciendo derroche,
mezclándose entre todas ellas.

Se oye el canto de los grillos
y también de las cigarras,
el graznar de las gaviotas
y cantos de los chiquillos,
al tocar con sus guitarras.

La brisa y la tibia arena
será el piso de mi casa,
la espuma blanca el espejo
y el canto de una sirena,
es la herencia de mi raza.

Nombre raro el de mi playa
por eso no es conocida,
El Bejuco consentido
no sabrá cuando me vaya
al terminarse mi vida.

Señores ya me despido
disculpen lo mal trovado,
hoy me ha llegado cupido
y mi pecho ha atravesado
en este cielo divino.

Me enamora con sus aguas
diáfanas y cristalinas,
su gente y sus laderas,
sus hornos que como fraguas
hornean las empanadas.

Este es un tributo pequeño
a la tierra que yo añoro,
lo hice con mucho amor
y como lo hiciera un niño
hay veces que hasta lloro
aquí encontré un gran tesoro.

SHANIA LYNN

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